Es la infracción criminal que se produce cuando el padre/madre, sin causa justificada, sustrae a su hijo menor. La conducta se puede castigar con una condena de prisión de 4 años e inhabilitación para el ejercicio de la patria potestad de hasta 10 años.
Cuando se traslada al menor de su lugar de residencia sin el consentimiento del progenitor con el que convive habitualmente o de las personas a las que esté confiada su guarda y custodia.
Cuando se retenga al menor incumpliendo gravemente el deber establecido por una resolución judicial o administrativa.
El delito se agrava. Siempre habrá una condena mínima de 3 años de prisión, que puede llegar a los 4 años.
Que el padre/madre que ha sustraído al hijo menor comunique al otro el lugar de estancia con el compromiso de proceder a la devolución inmediata del menor o cuando la ausencia del menor no es superior a 24 horas.